TIROIDES





La tiroides es una glándula endocrina que se encuentra en la parte anterior e inferior del cuello, por debajo de la laringe. La tiroides secreta hormonas vitales para el metabolismo y el crecimiento. Cualquier incremento de la tiroides, independientemente de la causa, se llama bocio.
La glándula está constituida por dos lóbulos alargados situados a ambos lados de la tráquea y conectados por una banda estrecha de tejido llamado istmo. Su forma se asemeja a de una mariposa. En los adultos normales, la glándula tiroides pesa entre 10 y 20 gramos.
Tanto los lóbulos de la glándula como el istmo, contienen muchos saquitos globulares llamadas folículos. Los folículos están revestidos de células foliculares que se llenan con un líquido coloidal, el cual contiene tiroglobulina (una pro-hormona). Las células foliculares contienen las enzimas necesarias para sintetizar la tiroglobulina y liberar la hormona tiroidea de la tiroglobulina. Cuando las hormonas tiroideas son necesarias, la tiroglobulina se reabsorbe en el lumen folicular en las células, donde se divide en sus componentes, incluyendo las  hormonas tiroxina (T4) y triyodotironina (T3). Las hormonas son liberadas de las células hacia la circulación.

¿Cómo se producen las hormonas tiroideas?
Tiroxina y triyodotironina contienen yodo y se forman a partir tironinas (se componen de dos moléculas del aminoácido tirosina). El yodo y la tirosina se obtienen mediante la dieta.
La tiroxina contiene cuatro átomos de yodo y la triyodotironina contiene tres átomos de yodo. Estas dos hormonas son las únicas sustancias biológicamente activas que contienen yodo y no pueden ser producidas en ausencia de yodo.
La síntesis de tiroxina y triyodotironina comienza en las células foliculares de la tiroides, que concentran el yodo del suero. El yodo se oxida y, unido a los residuos de tirosina, forman las iodotirosinas dentro de las moléculas de tiroglobulina. Los residuos de tirosina yodados luego se reorganizan para formar la tiroxina y triyodotironina.
En muchos tejidos, la tiroxina se convierte en triiodotironina por la acción de las enzimas deiodinasas. La triyodotironina puede entrar en el núcleo celular o retornar a la circulación.

En el suero sanguíneo, el  99% de las hormonas tiroideas se unen a proteínas llamadas globulina fijadora de tiroxina, pre-albúmina fijadora de tiroxina y albúmina. El resto de la tiroxina y la triyodotironina (menos del 1%) está libre. Cuando la hormona libre entra en la célula, se reúne inmediatamente con las proteínas de unión. Las proteínas de unión sirven como reservorios de las dos hormonas para proteger a los tejidos de los aumentos repentinos de la producción de hormona tiroidea y para facilitar la entrega de las hormonas a las células.

En todas las células actúa la triyodotironina. Una vez que la triyodotironina está dentro de una célula, entra al núcleo, donde se une a las proteínas conocidas como receptores nucleares. Los complejos del receptor de triyodotironina se unen al ácido desoxirribonucleico (ADN),  resultando en un aumento de la velocidad de transcripción para producir ácido ribonucleico mensajero (ARNm) y en un incremento en la tasa de síntesis de la proteína codificada por el ADN (por medio del ARNm).
La triyodotironina aumenta la transcripción de las moléculas de ADN que codifican diferentes  proteínas y también inhibe la transcripción del ADN que codifica otros tipos  proteínas. Los patrones de activación y la inhibición van a depender de los diferentes tipos de  tejidos celulares.

¿Cómo actúan las hormonas tiroideas?
  • La triyodotironina activa sustancias que aumentan la proporción de energía que se disipa en forma de calor
  • Las hormonas tiroideas regulan el metabolismo de los órganos y los sistemas. La triyodotironina estimula el metabolismo y la utilización de carbohidratos y de lípidos, lo que disminuye el depósito de grasa, incrementa la concentración plasmática de ácidos grasos libres, acelera la oxidación celular y estimula la formación de receptores LDL  
  • La triyodotironina aumenta la frecuencia cardiaca ya que produce activación del sistema nervioso central y autónomo, lo que ocasiona un aumento de la contracción y el ritmo cardíaco
  • Durante la vida fetal y la infancia, la actividad estimulante de la triyodotironina es de vital importancia para el crecimiento normal del esqueleto,  la maduración del sistema nervioso central y el desarrollo mental, por lo que el déficit de triyodotironina en los recién nacidos está asociado con el enanismo y la discapacidad intelectual
¿Cómo se regulan las hormonas tiroideas?
La función de la glándula tiroides es controlada por un sistema de retroalimentación negativa del sistema de regulación endocrina, que se lleva a cabo por el eje hipotálamo-hipoficiario-tiroideo.
La producción y secreción de T4 y T3 por la glándula tiroides es estimulada  por la hormona liberadora de tirotropina hipotalámica TRH, la que estimula la parte anterior de la hipófisis para que secrete la hormona estimulante del tiroides TSH, la cual estimula la glándula tiroides para que se secreten las hormonas T4 y T3.
A su vez, las hormonas tiroideas inhiben la producción y secreción de ambas hormonas liberadoras de tirotropina y tirotropina, proporcionando la retroalimentación negativa sobre el hipotálamo y la glándula pituitaria o hipofisaria. Una disminución en la producción de las hormonas tiroideas, estimula la secreción de TRH y TSH, produciendo un aumento de hormonas tiroideas. Esto restaura los niveles normales de concentraciones plasmáticas de las hormonas tiroides.
Gran parte de la triyodotironina se produce cada día a causa de la desyodación de tiroxina en tejidos extra-tiroideos.
La conversión de tiroxina en triyodotironina disminuye significativamente en los siguientes casos:
  • Desnutrición
  • Infecciones
  • Cáncer
  • Enfermedades  hepáticas, cardiacas  y renales
  • Hambre
  • Uso de algunas drogas y medicamentos
Estas situaciones disminuyen la cantidad de triyodotironina sérica y las concentraciones de los tejidos. Esta disminución en la producción de triyodotironina puede ser una adaptación beneficiosa para el hambre y la enfermedad, ya que reduce la degradación de proteínas y disminuye el uso de nutrientes para la generación de calor, manteniendo la integridad del tejido y la conservación de los recursos energéticos.

¿Cuáles son las enfermedades tiroideas más frecuentes?
Las enfermedades de la tiroides más comunes son:

Comentarios

  1. Fantastico blog Jaume. Me encanta. Gracias por dedicar tu tiempo a llenarte de cosas buenas para despues compartirlas y hacer el bien a los demas.
    Que la vida te pague con la misma bondad.

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