El sangrado y la inflamación de las encías, por lo general, son causadas por la gingivitis, una enfermedad que, cuando no se trata, conduce a la enfermedad periodontal.
Aunque hay muchas causas, la más común es la mala higiene bucal.
Aunque hay muchas causas, la más común es la mala higiene bucal.
Cuando los dientes no son cepillados con regularidad, las bacterias se acumulan en la superficie. Si no se lava, esta bacteria genera una acumulación de placa en la línea de la encía dando lugar a la gingivitis. Por suerte, hay opciones de tratamiento, todos los cuales son baratos y se puede hacer en casa.
Remedios caseros para las encías inflamadas y sangrantes:.
Enjuaga con agua tibia y sal
Mezcla una pizca de sal con agua tibia y enjuaga la boca dos veces al día para ayudar a aumentar la circulación sanguínea en las encías y reducir la hinchazón.
Mezcla agua y un peróxido (agua oxigenada)
Utilizando esta solución tres veces a la semana puedes ayudar bloquear bacterias que se desarrollan en la superficie de los dientes.
Usa una mezcla de mitad de agua y mitad de peróxido de hidrógeno para hacer buches alrededor de tu boca durante 30 segundos. Asegúrate de escupir toda la mezcla. ¡No la tragues!.
Usa una mezcla de mitad de agua y mitad de peróxido de hidrógeno para hacer buches alrededor de tu boca durante 30 segundos. Asegúrate de escupir toda la mezcla. ¡No la tragues!.
Masajes en las encías
Coloca el dedo índice en la parte exterior de las encías y el pulgar en el interior, y luego suavemente masajea. Ayudarás a aumentar la circulación sanguínea y puede reducir la inflamación.
Cepilla las encías
Dale ángulo a tu cepillo de dientes para cepillar con la mitad en las encías y la otra mitad en los dientes, luego mueve el cepillo suavemente con un movimiento circular.
Esto ayuda a limpiar la superficie de tus dientes al mismo tiempo que elimina la placa que hay debajo de la línea de las encías.
Esto ayuda a limpiar la superficie de tus dientes al mismo tiempo que elimina la placa que hay debajo de la línea de las encías.
Usa bicarbonato de sodio
Haz una pasta de bicarbonato de sodio y agua y aplícala en tu línea de las encías con el dedo.
Una vez aplicada, comienza a cepillar los dientes. El bicarbonato neutraliza las bacterias bajo la línea de las encías, y ayuda a prevenir que se formen en la placa.
Una vez aplicada, comienza a cepillar los dientes. El bicarbonato neutraliza las bacterias bajo la línea de las encías, y ayuda a prevenir que se formen en la placa.
Fuente: Todos Los Como
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